Para entender a qué nos dedicamos, primero deben conocer el contexto en el que Mano Digital pasó de ser un proyecto de dos estudiantes de diseño gráfico y programación, a una agencia digital con su propia estructura, métodos de trabajo claros, objetivos y lo más importante: clientes.
El proyecto fue lanzado oficialmente a mediados de mayo de 2020, situación en la que Argentina y el mundo se encontraban sacudidos por el Covid-19, aislamiento social obligatorio, miedo e incertidumbre.
Con esta pandemia en marcha, algo nunca visto por el mundo moderno, las economías se derrumbaron, por lo que muchas empresas, comercios y negocios comenzaron a quebrar irremediablemente. Entre toda esta desgracia, sólo un grupo reducido de negocios pudo sobrevivir y hasta crecer: los que tenían una buena presencia en línea, comercios electrónicos e influencia en las redes sociales.
El paradigma de los negocios, que ya venía modificándose con el avance de estas tecnologías, cambió ABRUPTAMENTE, y nada volverá a ser igual.
Con la pérdida de nuestros trabajos, y aprovechando los conocimientos que ya teníamos en la materia de desarrollo web y diseño gráfico (mediante cursos y seminarios, pero siempre aplicados a proyectos personales o ayudar a amigos,amigas y familiares emprendedores) decidimos lanzarnos a un mercado que hoy en día es el que mueve al planeta: el internet.
Así es como Agustín y Lautaro Sanchez, ahora Mano Digital, empezarían su camino cómo asesores para pequeños emprendimientos y comercios locales en materia de presencia en línea.
Sin saber qué, nuestros ahora socios Constanza Kanemann y Gastón Acosta, estaban dedicándose a lo mismo del otro lado del Atlántico, en Barcelona para ser precisos, donde emigraron buscando nuevas oportunidades de crecimiento y dejando mucho atrás.
Cómo muchas de las historias modernas, la nuestra comienza con un mensaje de redes sociales, felicitando e intercambiando información entre colegas, hasta que tomamos la decisión de unir recursos, conocimientos y experiencias en un nuevo y gran proyecto: fundar nuestra propia agencia digital.
Con el paso del tiempo y de nuevos clientes, fuimos ganando profesionalismo y nuevas aptitudes, como marketing digital, email marketing, gestión de campañas publicitarias en Google y Facebook Ads, diseño de piezas gráficas para impresión, y dominando las que ya teníamos.
Así es como hoy en día podemos brindarles un trabajo profesional, donde los objetivos y los métodos son claros, las herramientas son las adecuadas, y el crecimiento de nuestros clientes es un hecho.